Cirugía
La intervención se realiza en quirófano bajo anestesia raquídea y tiene una duración de entre 2 y 3 horas. Se realiza mediante una incisión horizontal por encima del pubis a través de la cual se libera la piel y la grasa para proceder a su posterior extirpación. En el mismo acto, se repara la separación muscular. Es necesaria la colocación de unos drenajes que se mantendrán 24 horas aproximadamente.
Una vez terminada la cirugía, se coloca una faja abdominal que se mantendrá en el postoperatorio inmediato.
Postoperatorio
Suele ser bien tolerado en la mayoría de los casos. Es normal que noten molestias o sensación de tensión en la zona que se calman con los analgésicos por vía oral.
Durante los primeros días se recomienda al paciente caminar con el tronco ligeramente inclinado para evitar la tensión en la zona intervenida.
La cicatriz quedará a nivel suprapúbico y puede ser fácilmente escondida por la ropa interior o el bikini.
Se deben evitar los ejercicios y esfuerzos durante el primer mes. Durante este tiempo se recomienda mantener la faja abdominal.
Es recomendable la deambulación precoz y el uso de masajes de drenaje linfático post operatorios para favorecer la recuperación.
Los resultados son muy satisfactorios pues se consigue una mejoría importante en la calidad de vida y a nivel estético, obteniendo un abdomen plano y estilizado.